El tema de los juguetes es algo en lo que me he implicado mucho desde el principio. No sólo en la calidad o el tipo de juguete, sino también en la cantidad. Tenemos mucha familia, así que el peque (pese a la insistencia por nuestra parte) se ha juntado con muchos juguetes entre Reyes y su cumple. Lo que hemos hecho es darle una selección y guardar el resto en una caja. Cuando vemos que deja de jugar con alguno, lo guardamos y sacamos uno nuevo. Eso sí, hay cinco juguetes, que además son educativos, de los que parece no cansarse nunca y esos son de los que voy a hablaros hoy (he dejado fuera los libros infantiles, que son uno de sus entretenimientos favoritos, porque hace nada que escribí varias recomendaciones en esta entrada). ¡Dentro post!
Juguete aros de colores
Cuando le regalaron el primero (este modelo de Chicco), tenía casi nueve meses. Jugaba con ello, pero era muy pequeño para poder meter los aros. Ahora no se le resiste ni uno. Es increíble ver todo lo que ha evolucionado en tan pocos meses. En navidades le regalaron otro, así que el elefante se ha quedado en nuestra casa y el otro en la de los abuelos. Se entretiene muchísimo con ambos modelos. Con este tipo de juguetes se trabaja la concentración y la psicomotricidad fina.

Caja con figuras geométricas y juguete de arrastre
Dos en uno. Este juguete también se lo trajeron los Reyes y desde entonces no se ha cansado de él. Al principio no lograba encajar ninguna pieza. Ahora lo consigue en un periquete. Además, este juguete es de arrastre, aunque he de decir que a mi peque esa parte no le llama nada la atención. Estos juguetes de encaje de formas les proporciona muchos conocimientos matemáticos sencillos como el tamaño; el reconocimiento de formas; las figuras geométricas; los volúmenes; el concepto de unidad, de grupo y de espacio; el concepto de lleno y vacío; o la geometría espacial. Este juguete también les ayuda a distinguir colores y a trabajar la motricidad fina.

Bloques de construcción
Fue otro de los regalos de Reyes, pero decidimos guardarlo en la caja de reserva. Se lo sacamos hace un mes y desde entonces, está en sus top 5 de sus juguetes preferidos. Los bloques de construcción desarrollan su capacidad espacial y agilidad mental; mejoran su coordinación; les enseñan lo que es el equilibrio; fomentan la creatividad; y les ayudan a ser organizados.

La pelota, un clásico de entre los juguetes
¿Qué levante la mano quién no haya tenido una pelota cuando en su infancia? Es un clásico. Un juguete sencillo, pero que tiene múltiples ventajas, como la de ayudar a desarrollar la coordinación motriz y visual. A él le enantan estas dos. La roja es Dideco. Es como si fuese un peluche y lleva un cascabel dentro (al principio no le llamó nada la atención y ha estado en la caja de reserva un par de meses). La ventaja de este modelo es que no hace nada de ruido y ni daño si se da con ella. Es muy blandita. La otra es de Eurekakids y como punto a favor (pese a que como también es sonajero, es más ruidosa que la anterior) diré que es mucho más fácil de agarrar.
Los animales: el arca de Noé
Otro de los juguetes por excelencia. Por una parte, aprenden a diferenciar los distintos animales, tanto su apariencia como los sonidos que emiten. Además, cada uno lleva una forma geométrica en la base. Y por otro lado incorpora un pequeño teclado, lo que le convierte en un juguete musical, que le ayudará a desarrollar la habilidad manual, el razonamiento, la coordinación entre ojos y manos, la creatividad, la memoria o la curiosidad.
Este que tenemos nosotros es de El Corte Inglés y aunque acabo de descubrir que tiene malas opiniones en la web, a nosotros nos funciona perfectamente y al peque le gusta mucho.
Espero que os haya inspirado esta pequeña selección de juguetes educativos. Ahora mismo estos cinco juguetes son con los que más juega mi chiquitín. Y para vuestr@s peques, ¿cuáles son sus juguetes favoritos?
Nos leemos pronto.
¡Hasta MAraMA!